¡Pero soy tímida!

“Cuéntame, ¿cómo te fue en tu primer día?”, preguntó mamá.

Mery solo miraba el paisaje por la ventana.  “Bastante bien.  Una niña que se llama Daniela se ofreció a mostrarme el lugar.  Si no hubiera sido por ella, me habría sentido totalmente desamparada.  ¡Esa escuela es enorme!”

La mamá ajustó el espejo retrovisor para ver mejor a su hija.  “Me alegra que hayas encontrado una amiga tan rápidamente.  ¡Parece una buena persona!”

Mery frunció el ceño.  “En realidad, parecía muy tímida.  Cada vez que le hacía una pregunta, se ponía de color rosado brillante y solo balbuceaba la respuesta”.

“¿De veras?”, cuestionó la mamá.  “Me pregunto por qué decidió ayudarte si es tan tímida”.

“Bueno, me contó que se mudó acá al inicio del año, así que probablemente es porque sabe cómo me siento”, dijo Mery, riéndose.  “Eso y que nuestra maestra le pidió que me mostrara el lugar”.

En ese momento pasaron por la nueva iglesia a la que empezaron a asistir el domingo.  “¿Sabes si Daniela va a alguna iglesia?  Me pregunto si ella conoce a Jesús”

Mery suspiró.  “Tengo mucho miedo de hablar con la gente de ese tema, mamá.  No todos creen en Jesús como nosotros”.

“Esa es exactamente la razón por la que Jesús quiere que hablemos de Él”, expresó mamá.

Mery apoyó su cabeza en la ventana y no respondió.

“¿Y si Daniela se hubiera rehusado a hacer lo que tu maestra le pidió y no te hubiera mostrado hoy la escuela?”, preguntó la mamá.

Mery levantó la cabeza.  “Me hubiera sentido miserable.  Me hubiera sentido perdida”.

“¿Crees que fue fácil para Daniela vencer su timidez para ayudarte?”  Mery hizo un gesto negativo con la cabeza.  “Ella se portó muy valiente”.

La mamá asintió.  “Te hubieras sentido perdida sin que Daniela te ayudara en la escuela y nosotros no sentiríamos perdidos si Jesús no nos salvara de nuestro pecado.  Esa es la razón por la que Jesús quiere que contemos a la gente sobre Él.  Puede ser que te dé miedo, pero Él estará contigo y te dará la valentía para que puedas alcanzar a los que necesitan desesperadamente de Jesús”.

Cuando finalmente llegaron a la casa, Mery sonrió.  “¿Puedo invitar a Daniela el fin de semana?  Creo que ambas necesitamos una amiga.  ¿Crees que, tal vez, tú puedas ayudarme a hablar con ella?”

Mamá sonrió en el espejo retrovisor.  “¡Me parece una excelente idea!”

REBEKAH  LOVE DORRIS

CUÉNTALES A OTROS ACERCA DE JESÚS

VERSÍCULO CLAVE: MATEO 28:19

 [JESÚS DIJO,] “VAYAN, PUES, Y HAGAN DISCÍPULOS DE TODAS LAS NACIONES”.

¿Alguna vez has tenido miedo de hablar con la gente acerca de Jesús?  A veces puede dar miedo, pero no permitas que tu timidez sea un obstáculo para contar a otros lo que Jesús ha hecho por ellos.  Tú conoces a Jesús porque alguien fue lo suficientemente valiente como para hablarte sobre Él, y Él desea que tú corras la voz a otros que no lo conocen.  Confía en que Él estará contigo y te ayudará a compartir de Su amor con los demás.

Clave de Hoy
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