El leproso

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“Mamá, no entiendo este versículo”, dijo Alex.  “Es 2 Corintios 5:21: ‘Al que no conoció pecado, Lo hizo pecado por nosotros, para que fuéramos hechos justicia de Dios en Él’.  Sé que está hablando de Jesús, pero ¿qué significa cuando dice que lo hizo pecado por nosotros?  Jesús nunca pecó, ¿verdad?”

“No, nunca pecó”, afirmó la madre.  “Esa es la razón por la que pudo salvarnos al tomar nuestros pecados y ponerlos sobre Sí mismo.  Deja ver si puedo encontrar la manera de ayudarte a comprender”.  Ella buscó una fotografía en su teléfono.  “Esta es la foto de un leproso, una persona que tiene lepra.  Es una enfermedad contagiosa que con frecuencia se menciona en la Biblia y todavía existe en algunas partes del mundo hoy en día”.

Alex miró la fotografía y frunció el ceño.  “Pobre hombre.  No tiene dedos en las manos ni en los pies, ¡solo unos muñones feos!”

“Así es”, replicó su mamá, “y también es ciego.  Si vieras a este hombre, ¿qué harías por él?”

Alex lo pensó por un momento.  “Le daría un poco de agua y algo de comer”.

“Pero está muriendo”, agregó la madre.  “¿Lo amarías lo suficiente como para sentarte junto a él, tomarlo en tus brazos y decirle que, si pone su confianza en Jesús, irá al cielo?”

Alex vaciló un poco, pero luego asintió con la cabeza.  “Pero me gustaría usar una máscara, para no enfermarme”.

“Pero ¿qué harías si tuvieras que enfermarte para poder ayudarlo en verdad?”, preguntó su mamá.  “¿Y si tuvieras el poder de permitir que toda su enfermedad fluyera en tu cuerpo y dejar que toda tu fuerza y salud fluyeran al cuerpo de él?  ¿Lo harías?”

Alex se encogió de hombros ante la idea.  “No creo que podría hacerlo”, señaló.  “¡Ese hombre tiene una enfermedad horrible!”

La madre hizo un gesto afirmativo.  “Sin embargo, eso fue lo que Jesús hizo por nosotros, Alex.  Él nunca pecó, pero tomó todo nuestro pecado y lo puso sobre Sí mismo, muriendo en una cruz para recibir nuestro castigo.  Esa es la razón por la que Él sufrió tanto, no solo el dolor físico de la crucifixión, sino que también tuvo que cargar con el peso aplastador de nuestro pecado”.

Alex meditó en las palabras de su mamá.  “Creo que ya estoy comenzando a entender”.–HARRY C. TROVER

JESÚS TOMÓ TU PECADO LO PUSO SOBRE SÍ MISMO

VERSÍCULO CLAVE: 2 CORINTIOS 5:21

AL QUE NO CONOCIÓ PECADO, LO HIZO PECADO POR NOSOTROS, PARA QUE FUÉRAMOS HECHOS JUSTICIA DE DIOS EN EL.

¿Has pensado alguna vez en lo que hizo Jesús cuando murió por tus pecados?  Él sufrió una gran vergüenza y horror al tomar tu pecado y ponerlo sobre Sí mismo.  Él tomó tu lugar en la cruz, para que puedas pasar la eternidad en el cielo con Él, y no en el inferno.  ¡Jesús te ama tanto!  Acepta Su sacrificio por tus pecados y confía en Él.  (Lee aquí sobre las Buenas Nuevas que Dios tiene para ti).