El Creador es capaz

—Papá, ¿sabes cuál es el roedor más grande del mundo? —preguntó Ramiro, haciendo una pausa mientras hacía sus tareas.

—¿Los castores? —adivinó su padre.

—Eso es lo que los castores quieren que creas —bromeó Ramiro—. En realidad, son los capibaras. Estamos aprendiendo de ellos en la escuela.

—¡Ja! Nunca había oído de ellos —admitió papá—. Cuéntame más.

—Los capibaras viven en algunas partes de Sudamérica y pueden pesar hasta 68 kilogramos. Son animales semiacuáticos ¡y pueden permanecer bajo el agua hasta por cinco minutos! Son herbívoros y viven en grupos de diez o más.

—Guau, ¡parecen unos animalitos muy capaces!

—Sí, es genial que Dios ha creado tantos animales tan geniales con características diferentes que necesitan para sobrevivir —Ramiro suspiró—. Pero ¿por qué Dios no te ha dado lo que necesitas, papá?

El padre puso su mano en el hombro de Ramiro.

—Hijo, sé que estás luchando con el diagnóstico que tengo… Todos hemos tenido que depender muchísimo de Dios para sobreponernos a esto.

—Pero, papá, no es justo. Tu cuerpo solo se va a poner peor, es probable que ni siquiera puedas mover tus brazos y piernas. No entiendo cómo puedes creer que Dios es capaz cuando te ha defraudado.

—Sé que parece que Dios nos ha defraudado, pero no lo ha hecho. Dios nunca nos prometió una vida libre de dolor y dificultades. De hecho, en Juan 16:33, Jesús dijo que en este mundo tendremos problemas. La buena noticia es que en Él podemos tener paz. Como hijos de Dios, no debemos tener miedo de lo que venga, porque Él está con nosotros para fortalecernos, ayudarnos y consolarnos. Recuerda que esta vida no es el fin, hijo. Dios ya nos ha provisto lo necesario para nuestra mayor necesidad: envió a Su Hijo a morir por nuestros pecados y después Lo resucitó de entre los muertos, para que podamos vivir con Él para siempre. Si Dios es capaz de eso, y además promete resucitarnos de entre los muertos algún día también, podemos confiar en que Él nos ayudará a sobrellevar cualquier dificultad.

—En el cielo ya no habrá más dolor ni sufrimiento, ¿verdad, papá?

—Ni siquiera una lágrima… excepto las de felicidad —aseguró papá con una sonrisa.

Ramiro respiró profundamente.

—Está bien. Sé que será difícil, pero voy a confiar en que el mismo Dios que creó los capibaras es también capaz para ayudarnos a salir adelante en esta dificultad.

SAVANNAH COLEMAN

DIOS ES CAPAZ

VERSÍCULO CLAVE: ROMANOS 8:18

CONSIDERO QUE LOS SUFRIMIENTOS DE ESTE TIEMPO PRESENTE NO SON DIGNOS DE SER COMPARADOS CON LA GLORIA QUE NOS HA DE SER REVELADA.

¿Alguna vez has tenido dudas de que Dios sea capaz? Cuando nosotros o las personas que amamos pasan por tiempos difíciles, podría parecer como si Dios no estuviera ahí, o incluso que está en nuestra contra. Pero Dios nos ama tanto que nos dio a Su único Hijo, Jesús, para que podamos ser perdonados por nuestros pecados y tener vida eterna. Él promete que estará con nosotros en todo lo que experimentemos. Y un día, Dios limpiará todas nuestras lágrimas.