Dios lo lavó

Mientras Pascal ayudaba a su mamá a limpiar la pared de la sala, no podía dejar de pensar en el día anterior.

—Estoy muy arrepentido por lo que hice, mamá.

—Hijo —contestó su madre—. Ya pasó. Estás arrepentido. Le pediste perdón a Dios. Una vez que Dios se hace cargo, se acabó.

Pascal frunció el ceño mientras restregaba la pared. Su hermanita menor no debió usarla como su lienzo.

—No debí haber robado esos chicles. Me sentí tan horrible. Nunca había robado antes. Nunca había pensado siquiera en robar. Pero… fue tan fácil.

—Vas a sentirte tentado a hacer muchas cosas como esa —sonrió su madre con tristeza—. Y muchas veces vas a ceder. Lo importante es que nunca te alejes de Dios por causa de tu culpa.

—¿Y eso no es lo que Dios preferiría?

Mamá negó con la cabeza.

—No. Jesús te ama tanto que quiere lavarte y dejarte limpio —ella dejó caer su trapo en el balde con agua jabonosa—. Creo que vamos a necesitar algo diferente para limpiar esta pared. Tomemos un descanso para ir a la tienda.

Un poco más tarde, la madre empezó a restregar nuevamente con la esponja especial que había comprado.

—¡Guau! En verdad funcionan estas esponjas —ella se alejó un poco de la pared—. ¿Puedes darte cuenta de dónde estaban los dibujos de tu hermana? —Pascal negó con la cabeza. Era como magia—. Así es como Jesús quiere lavarte, así es como Él te limpió cuando le pediste que te perdone —agregó mamá—. Ahora quiere que sigas adelante. No vamos a seguir mirando esta pared y pensar en lo que alguna vez estuvo aquí. La veremos como una pared nueva y limpia.

—Pero ¿por qué Dios debería perdonarme? —Pascal no estaba listo para soltar lo que sentía.

—Porque te ama. Porque Jesús murió por tus pecados para que pudieras ser limpio —su madre rio un poco—. No voy a comparar el amor que tengo por una casa limpia con el amor del Señor por ti, pero limpié esta pared porque me gusta mi hogar y me encanta cómo se ve cuando está limpio. Dios te ama, hijo. Le importas más que a cualquier otra persona. Él te ha perdonado por tu pecado y quiere que sueltes la culpa y la vergüenza.

Pascal miró la pared limpia. Después se volvió para ver a su mamá y sonrió.

EMILY ACKER

JESÚS TE HA LAVADO Y LIMPIADO

VERSÍCULO CLAVE: 1 JUAN 1:9

SI CONFESAMOS NUESTROS PECADOS, ÉL ES FIEL Y JUSTO PARA PERDONARNOS LOS PECADOS Y PARA LIMPIARNOS DE TODA MALDAD. 

¿Has hecho algo que no debías hacer y después te sentiste muy culpable? ¿La culpa te siguió aun después de pedirle perdón a Dios? Si has confiando en Jesús como tu Salvador, Él ha lavado tus pecados y te ha limpiado por completo. Todavía haces cosas malas a veces y, cuando eso sucede, tienes que confesarlas delante de Él. Después de eso, suelta la culpa porque sabes que Dios te ha perdonado.

Clave de Hoy
0 replies

Leave a Reply

Want to join the discussion?
Feel free to contribute!

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *