Ayuda para los que sufren

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Abraham vio cómo su hermano, Mario, entró a su habitación y dio un portazo.  Mario estaba en el bachillerato y últimamente siempre andaba de mal humor.  Abraham se sentía confundido por esto, porque su hermano antes solía ser muy alegre.

El niño al fin decidió contárselo a su abuelo.  “No entiendo, abuelito.  ¿Hice algo malo?  Mario me evita últimamente… o lo que es peor, ¡me grita y me insulta!”

“¿Ha estado actuando diferentemente con los demás también o es solo contigo?”, preguntó su abuelo.

Abraham se encogió de hombros.  “No sé… No lo he visto platicar mucho con papá y mamá últimamente.  Y ninguno de sus amigos ha ido de visita en mucho tiempo.  Pero antes Mario jugaba videojuegos conmigo casi todos los días, y ahora solo me ignora.  Debo haber hecho algo malo que le hizo enojar, ¡pero no tengo idea de qué le hice!”  El niño miró a su abuelo.  “Tú siempre miras esos programas de policías.  ¿Podrías decirme qué hice mal?”

El anciano sonrió.  “Hijo, creo que sé por qué Mario actúa así, y no es tu culpa.  Desde que me enteré de que él y Sara habían terminado su noviazgo, me di cuenta de que no se comportado como normalmente es él, aunque no sabía que estaba tan mal.  Creo que tal vez está deprimido, y eso podría verse de muchas maneras, como enojo, tristeza o pereza.  Pero no es tu culpa”.

Abraham se llenó de ánimo con la noticia.  “¿O sea que no hice nada malo?”

“No. Las relaciones rotas son dolorosas y Mario necesita tiempo para asimilar su pérdida.  Creo que lo mejor que podemos hacer por él es darle su espacio y hacerle saber que lo amamos.  Al mostrarle que él nos importa, incluso si nos ignora o se enoja, le recordaremos que Jesús lo ama y eso le ayudará a superar esta prueba.  Y ya que parece que Mario está lidiando con sentimientos de depresión, también deberíamos hablar con tus padres para sugerirles que busquen ayuda”.

“Además, tenemos que orar por él, ¿verdad?”, preguntó Abraham.

El abuelo asintió.  “Sí.  Oremos ahora mismo”.  —  ALEX CHILDS

DEMUESTRA AMOR A LAS PERSONAS QUE SUFREN

VERSÍCULO CLAVE: ROMANOS 12:15

GÓCENSE CON LOS QUE SE GOZAN Y LLOREN CON LOS QUE LLORAN.

¿Conoces a alguien como Mario?  O tal vez tú mismo te sientes triste. Las circunstancias dolorosas pueden hacer que las personas se pongan tristes o enojadas por mucho tiempo.*  Pero Jesús vino para darnos vida y podemos recordar el gozo de Su amor y saber que Él está con nosotros, aun cuando no nos sintamos felices. Si un amigo necesita animarse, comparte el amor de Jesús con él o con ella, y así le haces saber que te importa.

*Si tú o alguien que conoces está lidiando con sentimientos intensos de enojo o tristeza, cuéntaselo a un adulto de confianza, para que pueda recibir ayuda.