Mirar hacia adelante, no hacia atrás

—¡Fíjate por dónde vas! —Belén rápidamente se estiró y detuvo a su hermanita bebé para que no se chocara con la pared.

Su madre rio.

—Ella debería ver hacia adelante, en lugar de regresar a ver para asegurarse de que la estemos mirando, ¿cierto?

Belén se movió al sofá cuando su hermana se sentó en el piso con un juguete.

—Mamá, ¿crees que la abuela sabía cuánto me gustaba cuando ella horneaba postres para mía? —la niña abrazó sus rodillas, apoyándolas en su pecho.

—Sí —aseguró la madre—. Lo creo.

—¿Crees que me perdonó por esa vez que le grité?

—Sí —afirmó mamá—. Me parece que ella te lo dijo, ¿verdad?

Esa noche, Belén miró a su madre, a cuando llegó a su cuarto para darle las buenas noches.

—Quisiera haber recogido más a menudo flores en su jardín para la abuela. A ella le gustaba cuando yo le llevaba flores.

—Sí, le gustaba —indicó mamá.

—Y quisiera haberla ayudado a limpiar, en lugar de mirar televisión —los ojos de la niña se llenaron de lágrimas.

—Hijita… —mamá se arrodilló junto a su cama—. No puedes vivir con todos estos remordimientos.

Belén lloró.

—Pero debí portarme mejor.

La madre limpió una lágrima de la mejilla de su hija.

—¿Has visto cómo tu hermanita mira hacia atrás cuando está tratando de caminar?

Belén asintió.

—Nunca mira hacia dónde va, y después se choca con las cosas.

—Bueno, me parece que estás haciendo lo mismo —explicó mamá—. Estás tan ocupada mirando detrás de ti, preocupándote por lo que crees que debiste hacer diferente, que no ves lo que está frente a ti. No puedes dejar que los remordimientos te retengan, hijita. Todos cometemos errores a veces, pero Jesús nos da gracia. Su sacrificio en la cruz cubre todos nuestros pecados y fracasos. En lugar de permanecer en el pasado, podemos mirar al futuro y confiar en que Él nos ayudará a aprender de nuestros errores y a ser mejores —la madre sonrió y acarició el cabello de Belén—. Tu abuelita te amata, hijita, y sabía que la amabas. Ella te perdonaba cuando cometías errores. Ella está con Jesús ahora, y un día la volverás a ver. Ella no querría que estés triste, deseando haber hecho las cosas de diferente modo. Ella querría que te enfoques en Jesús y que confíes en que Él te ayudará a amar a las personas que todavía están aquí contigo.

EMILY ACKER

ENTREGA TUS REMORDIMIENTOS A JESÚS

VERSÍCULO CLAVE: FILIPENSES 3:13 (PDT)

NO CONSIDERO HABER LLEGADO YA A LA META, PERO ESTO SÍ ES LO QUE HAGO: ME OLVIDO DEL PASADO Y ME ESFUERZO POR ALCANZAR LO QUE ESTÁ ADELANTE.

¿Hay algo que hayas hecho en el pasado que quisieras poder cambiar? Tal vez dijiste o hiciste algo que ahora te causa remordimientos, o quisieras haber pasado de manera diferente el tiempo que pasaste con algún ser querido. Cada uno tiene momentos en nuestro pasado en el que podríamos haber hecho mejor las cosas, pero Jesús no quiere que nos enfoquemos en los errores del pasado. Más bien, podemos mirar hacia adelante, lo que Él está haciendo en nuestras vidas, y confiar en que el Señor nos ayudará a amar a otros.