La ropa apropiada

Olivia y Eloy estaban emocionados por la fiesta de disfraces que iban a hacer en su grupo de jóvenes. Había un premio para el mejor disfraz hecho en casa de algún personaje.

—Espero ganar el primer lugar —comentó Olivia mientras trabajaba en su disfraz de princesa. Ella le mostró a Eloy una pequeña corona de cartón decorada con cuentas—. ¿Te gusta mi tiara con joyas?

—¡Está linda! —opinó Eloy—. Acabo de terminar de hacer un sombrero para mi disfraz de Robin Hood —el niño mostró muy orgulloso su manualidad.

Olivia sonrió.

—Bueno, si yo no gano, ¡espero que tú sí!

Unos días después, cuando se vistieron para ir a la fiesta, su madre los miró.

—Los dos se ven muy bien —aseguró—. Yo les daría un premio a cada uno.

Después de la fiesta, Olivia y Eloy entraron corriendo a la casa.

—¡Adivina! —exclamó Eloy—. ¡Los dos ganamos! Los jueces no podían decidir cuál de los dos disfraces era mejor, así que dijeron que era un empate.

—Sí —Olivia asintió—. Creo que acaparamos los premios. Me siento un poquito culpable —la niña rio—. Un poquito, ¡pero no mucho!

—Bueno, me alegra que se hayan divertido, hijos —expresó mamá.

—Sí, la pasamos muy bien —afirmó Eloy—. ¡Y también aprendimos algo! El pastor Pérez habló de todo el trabajo que pusimos en los disfraces para una tarde de diversión. Después dijo que deberíamos asegurarnos de tener la ropa apropiada para algo mucho más importante. Nos explicó que la Biblia dice que debemos vestirnos con la salvación y la justicia.

Olivia asintió.

—Cuando confiamos en Jesús para que nos salve de nuestro pecado, somos cubiertos con Su bondad y eso nos hace aceptables ante los ojos de Dios. En ese sentido, Jesús nos da la ropa que necesitamos para tener vida eterna con Él.

—Eso es cierto —indicó su madre—. Esa es la ropa que en verdad importa. Muchas veces estamos preocupados por la ropa que vamos a usar para la escuela, el trabajo o incluso una fiesta de disfraces, pero es mucho más importante asegurarnos de tener la vestimenta correcta para la eternidad. Necesitamos que Jesús nos cubra con Su bondad y Su gracia.

—Olivia y yo sí estamos vestidos para la eternidad —declaró Eloy.

—Sí. ¡Los dos conocemos a Jesús! —Olivia haló la falda de su vestido de princesa—. Pero, por ahora, estoy lista para sacarme este disfraz y ponerme mi pijama.

Mamá asintió.

—Buenas noches, Robin Hood y princesa Olivia.

HAZEL W. MARETT

VÍSTETE PARA LA ETERNIDAD

VERSÍCULO CLAVE: ISAÍAS 61:10

EN GRAN MANERA ME GOZARÉ EN EL SEÑOR,

MI ALMA SE REGOCIJARÁ EN MI DIOS.

PORQUE ÉL ME HA VESTIDO DE ROPAS DE SALVACIÓN,

ME HA ENVUELTO EN MANTO DE JUSTICIA.

¿Le dedicas mucho esfuerzo a pesar en la ropa que te vas a poner para la escuela o para una fiesta de disfraces? Eso está bien, pero no te olvides de la vestimenta más importante de todas. Necesitas que Jesús te vista con la salvación y la justicia, es decir, necesitas que Él te salve del pecado y te dé Su bondad. Confía en Jesús, para que tengas la ropa apropiada para la eternidad. (Haz clic aquí para que conozcas las Buenas Nuevas que Dios tiene para ti).