La lista

Eliana acarició su vestido y metió la mano en su cartera para sentir las páginas gastadas de su libro. ¡No podía creer que iba a conocer a su escritora favorita! Una de las amigas de su madre trabajaba con la autora e invitó a Eliana a su mamá para que asistieran a un evento especial para autografiar libros. ¡Ya quería ver que su libro quedara autografiado!

Cuando entraron en el vestíbulo, un hombre con un sujetapapeles se les acercó.

—Sus nombres, por favor.

La madre dio los nombres y él pasó su dedo por toda la hoja.

—Lo siento —expresó—, pero sus nombres no están en la lista.

—¿Qué? —exclamó mamá—. No puede ser. Mi amiga nos invitó.

—Lo siento —volvió a decir el hombre—, pero este es un evento privado. Sus nombres tienen que estar en la lista para poder entrar.

Eliana sintió que la sangre se le subía a la cara. Miró su vestido morado y sus zapatos brillantes, y le dieron ganas de llorar. No conocería a su escritora favorita, después de todo.

—¡Esperen! —gritó una voz desde el pasillo. El corazón de Eliana latió con fuerza cuando vio a Carolina, la amiga de su madre, que se acercaba hacia ellas—. Está bien, Juan. Olvidé poner sus nombres en la lista, pero puedes agregarlas ahora —le indicó al hombre—. Están conmigo.

Él agregó los nombres a la lista y les hizo señas para que entraran. Carolina las guio a un salón grande lleno de gente, las sentó y enseguida salió apurada a terminar algunas cosas antes que empezara el evento. Eliana suspiró con alivio y sacó su libro.

—¡Qué miedo! Creí que ese hombre nos iba a echar porque nuestros nombres no estaban en la lista.

Mamá asintió.

—Qué bueno que Carolina haya venido a nuestro rescate —ella miró a su hija—. ¿Sabes? El no tener nuestros nombres en la lista de ese hombre cuando llegamos me recordó de cuán agradecida estoy porque mi nombre ya está en la lista más importante de todas.

—¿Cuál es esa lista? —preguntó Eliana.

—El libro de la vida —explicó mamá—. Es la lista de todos los que conocen a Jesús como su Salvador. Y la única manera en que puedes entrar en el cielo es si tu nombre está escrito ahí.

COURTNEY LASATER

ASEGÚRATE DE ESTAR EN LA LISTA DE DIOS

VERSÍCULO CLAVE: LUCAS 10:20

REGOCÍJENSE DE QUE SUS NOMBRES ESTÁN ESCRITOS EN LOS CIELOS.

¿Está tu nombre en la lista más importante de todas, en el libro de la vida? La única manera de hacer que tu nombre esté escrito en esa lista es al confiar en Jesús como tu Salvador. Cuando estábamos separados de Dios a causa de nuestro pecado, es decir, las cosas malas que hacemos, Jesús vino a rescatarnos. ¡Él murió y resucitó para salvarnos y darnos vida eterna! Cuando confías en Jesús, tu nombre queda escrito en el libro de la vida, y ahora puedes tener paz porque sabes que vivirás con Él para siempre. (Haz clic aquí para que conozcas las Buenas Nuevas que Dios tiene para ti).