Más que la arena

Una tarde calurosa, el papá de Lorelei y Brandon los llevó a la playa. Después de un refrescante chapuzón, se acostaron en una manta bajo una sombrilla. El padre leía un libro y Brandon jugaba con un reloj a prueba de agua que había llevado. Lorelei se sentó y tomó un puñado de arena. Soltó la mayor parte y después trató de separar los granos en la pequeña cantidad que le quedaba.

—¿Qué haces? —preguntó su hermano.

—Mi maestra en la iglesia dijo que nuestra lección de la próxima semana incluirá algo sobre la arena. Nos preguntó si alguna vez habíamos tratado de contar los granos, así que supuse que podría intentarlo —la niña siguió contando, o tratando de contar, los pequeños granos de arena en su mano.

—¡Eso es imposible! —exclamó Brandon después de observarla por un momento. Él torció los ojos, tomó su balsa y se dirigió nuevamente al agua.

Lorelei se sentó en la manta, mirando fijamente la arena, y papá levantó la mirada de su libro.

—¿Cómo te va con el conteo? ¿Piensas que podrás terminar de contar toda la playa esta tarde?

Lorelei regó la arena que tenía en la mano sobre sus pies.

—¡Me doy por vencida! Ni siquiera puedo contar un puñado.

—No —indicó su padre—. Esta es una playa grande y la arena es profunda. Y esta es solo una de muchas playas que hay en el mundo —él rio—. ¿No te parece maravilloso que no podamos contar los granos de sal?

Lorelei se veía confundida.

—¿Por qué es maravilloso?

Papá sacó su celular y buscó un versículo de la Biblia.

—En el Salmo 139:18 dice que los pensamientos de Dios para nosotros son «más que la arena». Eso significa que son más que todos los granos de arena en todo el mundo —explicó su padre—. ¡Imagínalo! —él tomó un puñado de arena y la dejó correr entre sus dedos—. Mucho antes que naciéramos, Él pensó en nosotros e ideó el plan perfecto para salvarnos del pecado a través de Su Hijo, Jesús. Y Él sigue pensando en nosotros ahora y se preocupa por cada detalle de nuestras vidas. Los pensamientos y el amor de Dios para nosotros son infinitos.

Lorelei llenó su balde hasta el tope con arena. Después lo volteó y observó cómo se derramaban los millones y trillones de granos.

—¡Guau! —expresó—. Esos son muchísimos pensamientos.

 NANCE E. KEYES

DIOS PIENSA EN TI

VERSÍCULO CLAVE: SALMO 40:5

MUCHAS SON, SEÑOR, DIOS MÍO, LAS MARAVILLAS QUE TÚ HAS HECHO, Y MUCHOS TUS DESIGNIOS PARA CON NOSOTROS… NO PODRÍAN SER ENUMERADOS.

¿Alguna vez has sentido que no le importas a nadie? Pues le importas al gran, asombroso y maravilloso Dios que creó todo el universo. Él ideó un plan para salvarte a través de Jesús, para que pudieras ser Su hijo o hija para siempre. Cuando te preguntes si tienes un propósito, piensa en cuánta arena existe. Después dale gracias a Dios porque eres tan especial para Él y Sus pensamientos para ti son más que toda la arena en todo el mundo.