De pesca con el abuelo

Josías estaba seguro de dos cosas acerca de su abuelo: ¡Amaba a Dios y le encantaba pescar! Josías estaba contando los días para pasar el fin de semana de pesca con su abuelo. Iban a pescar todo el día y luego pasarían las noches en la cabaña junto al lago.

—¡Hola, abuelito! —gritó Josías cuando salió del automóvil con un brinco. El abuelo abrazó con fuerza a su nieto y después se dirigió al cobertizo para alistar sus equipos para pescar—. ¡Ay! —exclamó el niño.

—Ten cuidado con los ganchos para pescar. Te pueden hacer daño —le recordó el abuelo.

Después de guardar todos sus equipos de pesca y el resto de sus provisiones en el automóvil, el abuelo dijo:

—Creo que tenemos todo. ¡Pongámonos en marcha!

La abuela se despidió con la mano mientras salían del garaje. El abueno aprovechó al máximo el viaje de treinta y cinco minutos a la cabaña para recordarle a Josías las medidas de seguridad para la pesca, en caso de incendio y las reglas de la cabaña. El abuelo se había jubilado del ejército, así que la estructura y los procedimientos apropiados eran muy importantes para él.

Cuando llegaron a la cabaña, desempacaron lo que habían guardado en el carro y cargaron el bote con sus equipos.

—Muy bien —declaró el abuelo—. ¡Vayamos a pescar!

—¡Sí! —Josías se subió al pequeño bote y el abuelo lo empujó para salir al agua. El motor hizo mucho ruido mientras viajaban al otro lado del lago.

Después de poner las carnadas en sus anzuelos y echar sus líneas al agua, los dos se sentaron en silencio por unos minutos.  En poco tiempo, los peces comenzaron a morder la carnada. Al final del día, habían atrapado una hielera llena de peces.

—¡Hoy cenaremos pescado frito fresco! —anunció el abuelo.

Después de la cena, el abuelo y Josías se sentaron junto a la fogata.

—¿Sabes, hijo? Atrapar todos esos peces me recordó una historia en la Biblia —el abuelo sacó una Biblia pequeña de su bolsillo y leyó sobre la vez que los discípulos de Jesús atraparon una enorme cantidad de peces y después Jesús les dijo que los haría pescadores de personas.

—¿Qué significa pescar personas, abuelito?

—Jesús quiere que hablemos a otros sobre Él. Desea que compartamos las Buenas Nuevas que Él nos ama, que murió y resucitó para salvarnos, para que otras personas también puedan conocerlo.

Josías sonrió.

—Gracias por traerme a pescar, abuelito, y por siempre recordarme cuánto Jesús me ama.

LISA FULLER

COMPARTE EL AMOR DE DIOS CON LOS DEMÁS

VERSÍCULO CLAVE: MARCOS 16:15 (NTV)

[JESÚS] LES DIJO: «VAYAN POR TODO EL MUNDO Y PREDIQUEN LA BUENA NOTICIA A TODOS».

¿Conoces a Jesús como tu Salvador? Si es así, Él te ayudará a contar a otros de Su amor, para que puedan conocerlo también. Juan 3:16 nos recuerda que Dios ama a todo el mundo y no quiere que nadie perezca, o sea, que se pierda sin Él. Confía en que el Señor te ayudará a compartir Su amor con los demás, y Él lo hará.