Un tiempo para recordar

Eliana y Celia habían sido mejores amigas por mucho tiempo. Vivían en la misma calle y estudiaban en la misma escuela. Pero ahora la familia de Celia se iba a mudar muy lejos.

En su último día juntos, las niñas jugaron en la casa de Eliana mientras los padres de Celia empacaban.

—Estoy tan triste —expresó Eliana—. No dejo de pensar en mañana y en los días que vendrán después. ¿Con quién voy a jugar?

—Quisiera no tener que irme —confesó Celia con un suspiro.

En ese momento, la mamá de Eliana las llamó a la cocina para que fueran a almorzar. «Este es nuestro último almuerzo juntas», pensó la niña con tristeza. Entonces tuvo una idea.

—Ya sé lo que podemos hacer —declaró mientras tomaba su sándwich de mantequilla de maní y mermelada—. Las dos comemos mucho estos sándwiches, ¿verdad? Cada vez que lo comamos, pensemos la una y la otra y recordemos todas las cosas divertidas que hicimos juntas.

—¡Qué buena idea! —exclamó Celia—. ¡Seremos amigas como la mantequilla de maní y la mermelada!

La madre de Eliana sonrió a las niñas.

—Sus sándwiches serán recordatorios de su amistad. ¿Eso no les hace pensar en algo que oyeron ayer en la iglesia?

—Eh… ¡Oh, sí, lo recuerdo! —señaló Eliana—. Durante la Cena del Señor, el pastor Jaime leyó sobre cómo Jesús comió la cena pascual con Sus discípulos, justo antes de ser crucificado. Jesús dijo que el pan y el vino eran recordatorios de Su cuerpo y Su sangre.

—¡Oh, sí! —afirmó Celia—. Jesús les dijo a Sus discípulos que, cuando se reunieran a comer y beber esas cosas, deberían pensar en Él y en lo que hizo. También dijo que deberían recordar que Él regresará algún día.

—¡Así es! —dijo mamá—. La Cena del Señor es un tiempo especial en el que la iglesia recuerda el sacrificio que Jesús hizo cuando murió en la cruz para salvarnos del pecado. Es un tiempo para recordar lo que Él hizo por nosotros y esperar con ansias el día en que celebraremos la Cena con Él, cuando regrese.

Eliana sonrió.

—Entonces, cada vez que tenga un sándwich de mantequilla de maní con mermelada, te recordaré, Celia… y esperaré con ansias el día en que tu familia regrese para visitarnos, ¡y ahí podremos comer otra vez juntas el sándwich de mantequilla de maní con mermelada!

—Claro —aseguró Celia—. ¡Pero lo mejor de todo es que algún día tendremos la Cena del Señor junto a Jesús!

Myrina D. McCullough

PIENSA EN JESÚS DURANTE LA CENA DEL SEÑOR

VERSÍCULO CLAVE: Lucas 22:19

ESTO ES MI CUERPO QUE POR USTEDES ES DADO; HAGAN ESTO EN MEMORIA DE MÍ.

¿Has pensado en el significado de la Cena del Señor en la iglesia? Cuando se pase el pan, piensa en el cuerpo de Jesús y cómo Él estuvo dispuesto a sufrir el dolor y tomar el castigo que tú merecías. Cuando se pase el jugo, recuerda que Él estuvo dispuesto a derramar Su sangre, a morir, para que tú pudieras tener vida eterna. Aprovecha este tiempo especial para recordar cuánto te ama Jesús y que Él volverá algún día.