Pastel de chocolate con capas de valentía
—¡Algo huele delicioso! —comentó papá al entrar en la cocina.
—Es porque es chocolate —Lucía apuntó tres tazones—. Será un pastel de chocolate con tres capas de chocolate oscuro, blanco y con leche.
El padre guiñó el ojo.
—Me alegra que hayas empezado a ver esos programas de pasteles en tu tiempo libre.
—¡Me pregunto por qué! —dijo Lucía con una risita.
—¿Cómo te está yendo con Nidia? —preguntó papá.
Lucía quitó las aspas de la batidora.
—Hemos sido amigas desde el jardín de niños, así que creí que sería más comprensiva cuando le conté de mi nueva relación con Jesús. En lugar de eso, las cosas se han puesto difíciles.
—¿Cómo es eso?
—Bueno, a veces solíamos burlarnos de otros niños en el comedor… era como nuestro juego, aunque nunca les decíamos nada de frente. Ahora no quiero hacer eso, porque pertenezco a Jesús y sé que Él ama a esos niños. Traté de explicárselo a Nidia, pero ella dice que Jesús me volvió aburrida.
—¿Y eso hizo que te comportaras como antes?
Lucía se encogió de hombros.
—Por un segundo, pero solo que quería que nuestra amistad fuera igual.
Papá asintió, pensativo.
—Hija, ¿recuerdas cuando empezaste a hornear? ¿Qué fue lo primero que hiciste?
—¡Esas terribles galletas de chispas de chocolate! Batí demasiado la masa y las dejé en el horno demasiado tiempo.
Su padre rio.
—Me sentí muy orgulloso de ti porque no dejaste que eso te hiciera renunciar. Seguiste horneando tus galletas y mejorando cada vez más, ¡y hoy estás haciendo un pastel de tres capas! Vivir una nueva vida en Cristo no siempre será fácil, pero tienes la promesa de Dios que Él estará contigo dondequiera que vayas. Como tienes Su Espíritu en ti, tendrás la valentía para hablar y actuar de una forma agradable al Señor.
—Tienes razón, papá. Mi aventura con el horno tomó tiempo, así que creo que tiene sentido que mi aventura en la fe también tome tiempo. Solo tengo que ser valiente y seguir dando el próximo paso —Lucía sonrió—. ¡Ya sé qué nombre le pondré a mi pastel! Será el pastel de chocolate con capas de valentía. Me recordará que, en cada etapa de mi vida, ¡Dios me dará lo que necesito para vivir con valentía para Él!
SAVANNAH COLEMAN
PUEDES VIVIR CON VALENTÍA EN LAS FUERZAS DE DIOS
VERSÍCULO CLAVE: JOSUÉ 1:9
¿NO TE LO HE ORDENADO YO? ¡SÉ FUERTE Y VALIENTE! NO TEMAS NI TE ACOBARDES, PORQUE EL SEÑOR TU DIOS ESTARÁ CONTIGO DONDEQUIERA QUE VAYAS.
¿Eres un hijo o hija de Dios? Cuando perteneces a Jesús, Él promete que nunca te dejará ni te abandonará, y que te dará todo lo que necesites para vivir de una manera agradable para el Señor. Puede ser que te dé miedo vivir de un modo que el mundo no siempre entenderá. Necesitas valentía para vivir para Jesús y hacer lo correcto. Con la ayuda de Dios, puedes decidir vivir valientemente y tomar decisiones a diario que demuestren a las demás personas Su amor.
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