Listos para la lluvia

Eleonora contó emocionada en su grupo de la iglesia sobre su viaje a Inglaterra:

—Lo más gracioso era que la mayoría de las personas llevaba paraguas a todos lados, ¡incluso en los días soleados! Eso nos parecía muy raro.

El señor Cazares asintió.

—Recuerdo que llovía mucho cuando visité Inglaterra hace varios años. ¿Llevaste también tu paraguas a todos lados?

Eleonora rio.

—Al principio, no, pero un día terminé empapada. Después de eso, normalmente llevaba el paraguas. Llueve mucho en la zona donde estábamos, incluso cuando parecería que no lloverá.

—Aprendiste que vale la pena estar preparada, así que llevabas tu sombrilla —el señor Cazares miró a la clase—. ¿Cuántos de ustedes están preparados para salir hoy? ¿Están listos para la lluvia?

—Se supone que hoy no lloverá —comentó Pedro.

—No estaba pensando en la lluvia literal —aseguró el señor Cazares—. Me preguntaba cuántos de nosotros estamos preparados para hablar con las personas.

—¿A qué se refiere? —preguntó Eleonora—. Hablamos con las personas todos los días. ¿Cómo se supone que deberíamos estar preparados?

—Uno nunca sabe cuando alguien nos lanzará una lluvia de preguntas —explicó el señor Cazares—. ¿Estarán listos con las respuestas?

—Pero ¿cómo podemos tener la respuesta lista si no sabemos cuál será la pregunta? —preguntó Eleonora.

El señor Cazares tomó su Biblia.

—Las preguntas serán una sorpresa, pero las respuestas están aquí, en este libro. El secreto es siempre tenerlas a la mano.

—¿Quiere decir que deberíamos llevar nuestras Biblias a todos lados, en caso de que nos hagan un montón de preguntas? —preguntó Pedro con incredulidad.

—Esa no sería una mala idea… y, de hecho, muchos ya lo hacemos —indicó el señor Cazares, sosteniendo su celular—. Pero también debemos llevar la Palabra de Dios en nuestras mentes y nuestros corazones. Cuando aprendemos más sobre Jesús al leer nuestras Biblias y al ir a la iglesia, Él nos ayudará a crecer en nuestro entendimiento de quién es Él y lo que hizo para salvarnos. Entonces, cuando las otras personas nos pregunten acerca de nuestra fe, podremos hablarles sobre Jesús. Memorizar versículos también puede ayudarnos a compartir la verdad de la Palabra de Dios con las personas. Uno nunca sabe cuándo recibirá una lluvia de preguntas, pero con la ayuda de Dios, siempre podemos tener lista una respuesta.

HEATHER TEKAVEC

PREPÁRATE PARA HABLAR SOBRE JESÚS

VERSÍCULO CLAVE: 1 PEDRO 3:15 (NVI)

ESTÉN SIEMPRE PREPARADOS PARA RESPONDER A TODO EL QUE PIDA RAZÓN DE LA ESPERANZA QUE HAY EN USTEDES. 

¿Qué dirías si alguien te pregunta cómo sabes que irás al cielo cuando mueras? Si alguien pregunta cómo podemos saber que Dios nos ama, ¿tendrías una respuesta? Mientras aprendes más sobre Jesús y Sus promesas en la Biblia, prepárate para dar una respuesta si alguien pregunta sobre tu fe. Confía en que Dios te ayudará a crecer en tu entendimiento de Su Palabra y a llevar su verdad en tu corazón.