Nuevo bebé

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Joselyn amaba a su hermanito bebé, Josías, pero últimamente parecía que mamá y papá ya no tenían tiempo para ella.  Ella y su madre solían hacer cosas juntas, solo las dos.  Pero ahora mamá parecía estar solamente enfocada en Josías.  El bebé tenía algunos problemas de salud que requerían mucho tiempo de sus padres.

Cuando su padre llegó a casa del trabajo, él y Joselyn salieron a jugar a la pelota.  “¡Comencé a escribir una canción sobre Jesús!”, le contó la niña.  “La he estado practicando en mi cabeza.  Espero que no se me olvide”.

“¡Qué bien!”, exclamó papá.  “¿Te gustaría ayuda para escribir una partitura de tu canción?”

“¡Eso sería genial!”  Entonces la sonrisa de Joselyn se convirtió en un ceño fruncido.  “Mamá dijo que no tenía tiempo para ayudarme con eso hoy.  Otra vez estaba muy ocupada con Josías”.

Su padre dejó de arrojar la pelota y se puso a pensar por un momento.  “Hemos estado muy ocupados con él últimamente, ¿cierto?  Tu mamá y yo sabíamos que tendrías que compartirnos con tu hermanito, pero nunca quisimos que ninguno de los dos piense que no es importante para nosotros o que no tenemos tiempo para ustedes”.

“Lo sé”, expresó Joselyn.  Luego sonrió.  “¡Solo quisiera tener una máquina para hacer una copia de ti y de mamá, para que pudieran estar todo el tiempo con los dos!”

Papá rio.  “¿Sabes?  A pesar de que no podemos estar siempre ahí, ¡nuestro Padre celestial sí puede!  Él siempre está aquí con nosotros, todo el tiempo.  Podemos acudir a Él en oración cada vez que nos sintamos solos o cuando necesitemos ayuda con alguna cosa”.

“¡Esa es una gran verdad, papá!  Entonces, aun cuando tú y mamá tengan que ayudar a Josías, yo puedo tener paz porque sé que Jesús está aquí, conmigo”.

“¡Exactamente!”, señaló su padre.  “Pero siempre avísanos a mamá o a mí cuando necesites tiempo con nosotros.  También queremos estar aquí, contigo”.  Papá lanzó la pelota a Joselyn.  “Ahora, antes de acabar nuestro juego, ¡quiero oír la canción que has estado escribiendo!”– JONATHAN WILES

DIOS SIEMPRE TIENE TIEMPO PARA TI

VERSÍCULO CLAVE: HEBREOS 13:5 (NVI)

DIOS HA DICHO: «NUNCA TE DEJARÉ; JAMÁS TE ABANDONARÉ».

¿Alguna vez has sentido que tienes que compartir a tu mamá o a tu papá con tus hermanos?  A lo mejor alguien en tu familia tiene un problema de salud o algún otro inconveniente que necesita atención extra.  Tu mamá o papá no siempre pueden darte su ayuda o atención cuando quieras, pero tu Padre celestial sí puede.  Acude a Él cada vez que tengas un problema o te sientas triste.  ¡Él siempre tiempo para ti, pase lo que pase!