Amnesia

Pericles saltó de un asiento a otro en la parte trasera del autobús de la escuela. Se reunió con los niños que estaban molestando a los demás y se reían a carcajadas cuando hacían gestos groseros a los automóviles que pasaban. Después de que él y los demás ignoraran varias advertencias, el conductor se estacionó y escribió sus nombres. Pericles se sintió avergonzado, y se sintió aún peor cuando se enteró de que iban a contactar a sus padres.

—Hoy me llamó tu director —comentó mamá cuando Pericles llegó a casa—. Tendremos que hablar de eso después. Primero debes hacer tus tareas.

Pericles se sintió aliviado cuando nadie mencionó su comportamiento durante la cena. Cuando terminaron de comer, papá puso las noticias en la televisión. La pantalla mostraba a un hombre que fue encontrado divagando por las callas. No podía recordar nada sobre su pasado, ni siquiera su propio nombre.

—Las autoridades creen que este hombre tiene amnesia —dijo el reportero—. Cualquier persona que provea información que pueda ayudarnos a identificar a este hombre debe notificarlo a la policía.

—¿No sabe su propio nombre? —preguntó Pericles—. ¡Eso es difícil de creer!

—Creen que tal vez recibió un fuerte golpe en la cabeza o que le pasó algo tan impactante que su cerebro reaccionó bloqueando todo —explicó su madre.

—¡Oh, qué triste! —expresó la hermanita menor de Pericles, Mila.

—¿Una persona realmente puede olvidar quién es? —preguntó el niño.

—Nos preguntábamos lo mismo después que tu mamá recibió una llamada de tu director —indicó papá—. Parecía como si hubieras sufrido de amnesia espiritual en el autobús. Parecía que te habías olvidado quién eras.

—¿Pericles tiene amnesia? —preguntó Mila, mirando a su hermano con ojos bien abiertos.

—Bueno, parece que olvidó que es un hijo de Dios —declaró papá—. Pericles, al igual que todos los demás cristianos, tiene el Espíritu Santo en su interior. Debido a la presencia de Dios en nosotros, tenemos la capacidad de hacer lo correcto y demostrar a los demás el amor de Jesús. Si nos olvidamos de eso y comenzamos a actuar con egoísmo, en lugar de amor, es como si tuviéramos amnesia espiritual: nos olvidamos de quiénes somos en Jesús —el padre se dirigió a su hijo—. ¿Alguna de las personas que estaban en el autobús esta mañana hubiera podido identificarte como alguien que pertenece a Jesús?

—Supongo que no —contestó Pericles—. Perdón.

Sus padres le sonrieron.

—Te perdonamos —respondió papá—. Y Jesús también te perdonará.

Nance E. Keyes

RECUERDA QUIÉN ERES EN JESÚS

VERSÍCULO CLAVE: Efesios 4:24 (NTV)

PÓNGANSE LA NUEVA NATURALEZA, CREADA PARA SER A LA SEMEJANZA DE DIOS, QUIEN ES VERDADERAMENTE JUSTO Y SANTO.

¿Recuerdas quién eres? Si has confiado en Jesús como tu Salvador, eres una hija o un hijo de Dios, y Él ha puesto Su amor en tu corazón y te ha dado Su Espíritu para guiarte a hacer lo correcto. No actúes como si sufrieras de amnesia espiritual. Recuerda quién eres en Jesús y demuestra Su amor en todo lo que hagas, para que los demás puedan identificarte como alguien que le pertenece al Señor.