El dibujo

—Hola, mamá. ¿Podemos comer una galleta? —preguntó Eloísa, y su madre asintió—. Hoy llegó una niña nueva a la escuela —le contó su hija mientras tomaba una galleta junto con su hermano, Jacob, de una caja en la alacena—. Tenías que verla. ¡Es tan bajita!

—Sí, parece que debería estar en el jardín de niños —agregó Jacob—. Tal vez sea una extraterrestre que viene del espacio exterior.

Ambos niños se echaron a reír. Su madre los miró muy severa. Antes de poder decir alguna cosa, Eloísa sacó un dibujo de su mochila.

—Mira lo que dibujé en la clase de arte —indicó, cambiando rápidamente el tema para evitar el regaño que sabía que su madre estaba a punto de darle—. Mi maestra dijo que está muy bien hecho.

Jacob masticaba su galleta mientras estudiaba el dibujo de una granja. El niño sonrió.

—Mira este cerdito —señaló y rio—. Las piernas son demasiado cortas para su cuerpo y sus orejas son muy largas. ¡Y mira ese caballo! —Jacob rio más fuerte—. Está peor que el cerdo. ¡Su cara parece la de una vaca!

—¡Mamá! —se quejó Eloísa—. ¡Jacob se está burlando de mí!

—No me estoy burlando de ti —aseguró su hermano al ver el ceño fruncido de su madre—. Solo me estoy burlando de tu dibujo, ¡no de ti!

—Yo hice ese dibujo, ¡así que también te estás burlando de mí! —chilló Eloísa, agarrando el dibujo para guardarlo.

—Tu hermana tiene razón —afirmó mamá—. Si te burlas del dibujo, te estás burlando de quien lo creó.

—Lo siento —balbuceó Jacob—. Solo estaba jugando.

La madre hizo una pausa por un segundo.

—Quiero decirles algo a ambos para que lo piensen. Si se burlan de la gente, como de la niña nueva de la escuela, por la forma en que fueron creados, ¿de quién se están burlando?

Tanto Eloísa como Jacob se quedaron sorprendidos.

—De Dios, supongo —respondió el niño.

—Exactamente. Cada persona ha sido creada por Dios y es especial —explicó mamá—. Cada persona es amada por Dios. De hecho, Él nos ama tanto que Jesús murió en la cruz por nosotros. Nunca se burlen de otros niños por la forma en que Dios los hizo. Recuerden cómo se sentirían ustedes si alguien se burlara de algo que hayan hecho.

Eloísa miró nuevamente su dibujo.

—No te preocupes —expresó—. Siempre lo recordaré.

—Sí —Jacobo estuvo de acuerdo—. Yo también.

A. W. SMITH

TODAS LAS PERSONAS SON ESPECIALES

VERSÍCULO CLAVE: SALMO 139:14

TE DARÉ GRACIAS, PORQUE ASOMBROSA Y MARAVILLOSAMENTE HE SIDO HECHO.

¿Alguna vez te has burlado de otros niños por su apariencia? Dios creó a cada persona que está en el mundo y cada una es única y especial. Jesús nos ama tanto a cada uno de nosotros que murió en la cruz para que podamos vivir con Él para siempre. Si te burlas de cómo alguien se ve, no solo le haces daño a esa persona, sino que te estás burlando de cómo Dios le creó. Recuerda que Dios ha creado y ama a cada persona y trata a todos con respeto.