Salsa extra

—Papá, ¿me pasas la salsa de carne, por favor? —pidió Noelia mientras se servía una enorme cucharada de puré de papas en su plato. El puré de patatas con salsa de carne era una de sus comidas favoritas, junto con la tarta de calabaza, que también estaba sobre la mesa.

Su padre le pasó la jarrita blanca.

—Vaya que sí te gusta el puré de papas.

—Sí, creo que sí —bromeó Noelia mientras echaba la salsa de carne encima de su puré.

—Guárdame un poquito —le dijo papá con una carcajada.

Noelia puso la jarrita con la salsa de carne nuevamente en la mesa.

—Extraño a mamá.

—Yo también —aseguró su padre—. Pero deberíamos estar agradecidos porque ella pudo ir a ayudarle a la tía Alba por un tiempo después de su cirugía. Sería difícil para tu tío Timoteo hacerlo solo.

—Me alegra que la operación haya salido bien —afirmó Noelia—. Quiero mucho a la tía Alba.

—Y realmente has ayudado a hacer las cosas mientras tu mamá está lejos —agregó papá—. Se siente muy bien tener ayuda extra por aquí, así como es bueno que la tía Alba tenga la ayuda extra de tu madre.

—Es como tener salsa extra para mi puré de patatas —sugirió Noelia.

—¿A qué te refieres? —preguntó papá.

—Bueno, la salsa de carne no es necesaria, el puré de papas sabe bien sin la salsa. Pero hace que tenga un sabor mucho mejor. Así como la ayuda que mamá le da a la tía Alba, hace que las cosas sean más fáciles, a pesar de que la tía Alba podría arreglárselas con la ayuda del tío Timoteo.

—Y tú has hecho que la cosas sean más fáciles para mí por acá —señaló su padre—. Podíamos habernos arreglado con todo, aun si no trabajabas más duro, pero estoy tan complacido porque lo hiciste —papá sonrió a su hija—. ¿Sabes? La Biblia dice que la disposición y el deseo de ayudar a otros apunta al hecho de que le pertenecemos a Jesús. Debido a que lo conocemos como nuestro Salvador, tenemos al Espíritu Santo, quien llena nuestros corazones con Su amor. Y tanto tú como tu madre han demostrado amor a través de sus acciones esta semana.

Papá se levantó y fue a la cocina para lavar los platos. Noelia lo siguió.

—Yo te ayudo —le dijo Noelia mientras empezaba a recoger los platos de la mesa.

—Bueno, claro que sí me gusta tener ayuda extra —declaró papá—. ¡Y significa mucho más para mí que un poquito de salsa extra en el puré de papas!

SHARON LEE ROBERTS

DEMUESTRA EL AMOR DE DIOS AL AYUDAR A OTROS

VERSÍCULO CLAVE: MATEO 25:40

[JESÚS DIJO:] EN VERDAD LES DIGO QUE EN CUANTO LO HICIERON A UNO DE ESTOS HERMANOS MÍOS, AUN A LOS MÁS PEQUEÑOS, A MÍ LO HICIERON.

¿Has dado ayuda extra a alguien que la haya necesitado? Quizá visitaste a alguien que estaba enfermo o ayudaste a un vecino con su trabajo en el jardín. A lo mejor tu familia ha experimentado una situación en la que tú necesitabas que alguien te ayudara. Una de las maneras en que Dios demuestra Su amor a las personas es a través de los cristianos que demuestran el tipo de amor que Jesús tiene por nosotros. ¿A quién puedes demostrar el amor de Dios con una ayuda extra en este día?