Carrera de fe

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“¡Brrrum!”  Clemente hizo rugir el motor de su automóvil de juguete favorito por el piso de la cocina.  “¡Venimos a una parada técnica!”, gritó.  Elim, su hermanito menor, sonrió y fingió cambiar los neumáticos a toda velocidad.  “También necesito combustible, Elim”, declaró el niño.

Elim hizo un sonido de líquido borboteando mientras “llenaba” el automóvil.  “¡En sus marcas, listos, FUERA!”  El pequeño batió sus brazos con emoción mientras Clemente volvía a la pista de carreras que habían construido alrededor de la cocina.

Alegría, la prima de los niños, alzó a ver por encima de su libro y los alentó: “¡Buen trabajo, pilotos!”  Ella miró a su tía, que estaba doblando la ropa limpia.  “¡Sin duda les encantan las carreras de autos!”

La tía Beatriz rio.  “¡Los niños no pasan un día sin ellas!  Es su juego favorito”.

Alegría meditó.  “Es como nuestra vida como cristianos.  Ayer estaba leyendo el libro de Hebreos en mi Biblia.  Decía que debemos deshacernos de todo lo que nos hace perder la velocidad, como nuestro pecado, para correr la carrera de la vida con perseverancia, manteniendo nuestros ojos fijos en Jesús.  Perseverancia significa no rendirse, ¿verdad?”

“Así es.  Significa que, aun cuando las cosas se pongan difíciles, seguimos adelante y confiamos en que Jesús nos ayudará.  El libro de Santiago nos dice que, cuando nuestra fe es probada, eso ayuda a producir perseverancia en nuestras vidas.  Solo debemos recordar que Jesús está con nosotros y buscar nuestras fuerzas en Él”.  La tía Beatriz se quedó pensativa.  “Sé que hay algo que me ayuda a hacerlo es pasar tiempo con Jesús.  Cuando oro y leo mi Biblia, recuerdo lo que Jesús ha hecho por mí y eso me da las fuerzas para seguir con la carrera.  Cuando me tomo el tiempo para detenerme y estar con Dios, Él me refresca”.

“¡Como una parada técnica santa!”, exclamó Alegría con una risita.  “Orar y leer la Biblia nos ayuda a mantener nuestros ojos fijos en Jesús”.

“Hablando de paradas técnicas”, comentó la tía Beatriz, “acabas de animarme a hacer una ahora mismo”.

Alegría la alentó con grandes voces, y sus primos la miraron, muy divertidos.  “¡Buen trabajo, tía Beatriz!  ¡Deja que Jesús te llene!”  —  SAVANNAH COLEMAN

VEN A JESÚS PARA UNA PARADA TÉCNICA

VERSÍCULO CLAVE: HEBREOS 12:1-2

CORRAMOS CON PACIENCIA LA CARRERA QUE TENEMOS POR DELANTE, PUESTOS LOS OJOS EN JESÚS, EL AUTOR Y CONSUMADOR DE LA FE.

¿Alguna vez has pensado en que tu vida es una carrera?  ¡El autor del libro de Hebreos lo creía así!  Él habla de la importancia de poner nuestros ojos en Jesús durante la carrera de la vida.  Debemos perseverar en la fe, recordando que Él está con nosotros a cada paso del camino.  Haz paradas técnicas regulares para orar y leer Su Palabra.  ¡Dios te llenará de recordatorios de Sus promesas y Su amor por ti!